El agua es un recurso valioso que debe utilizarse cuidadosamente. En todo el mundo hay un gran número de normativas muy diferentes y cada vez más estrictas en lo que respecta al uso del agua y a la protección del medio ambiente. Con la solución VRI de BAUER, el agua se aplica de la forma más económica posible: las láminas de riego pueden ajustarse automáticamente y con precisión a los diferentes cultivos y tipos de suelo, y se puede dejar de lado las zonas innecesarias, evitando también el riego excesivo o insuficiente. Los efluentes también se pueden regar sin problemas. El objetivo es maximizar el uso del agua, evitando el desperdicio y proporcionando, al mismo tiempo, agua suficiente para el cultivo, y cumpliendo con todas las normativas oficiales. ¡BAUER VRI lo hace más fácil!
VRI (Variable Rate Irrigation) significa que las diferentes partes de un campo pueden recibir la cantidad exacta de agua necesaria para un crecimiento óptimo del cultivo. Además, se pueden excluir del riego las zonas con obstáculos o caminos. Esto garantiza que no se desperdicie ni una gota de agua.
El principio VRI se basa en la activación y desactivación de boquillas individuales que se controlan mediante las llamadas cajas VRI especiales a través de un sistema BUS. En función de las necesidades de las plantes, se pueden programar diferentes zonas con distintas intensidades de riego. El sistema se puede supervisar y controlar a distancia a través de la aplicación SmartRain. Por lo tanto, se reducen las visitas de control a la máquina de riego.
Todos los sistemas BAUER Pivot, Linear y Centerliner pueden ser equipados con VRI. También es posible la adaptación a los sistemas ya existentes.
Los elementos esenciales de la solución BAUER VRI son:
Con la VRI se asegura de que no se desperdicie ni una gota de agua. La solución VRI de BAUER garantiza un uso específico del agua disponible y saca el máximo partido a cada hectárea. El requisito previo es la introducción precisa de los datos del campo y la creación de un plan de riego que se adapte con precisión al campo y a los cultivos respectivos.
Así se optimiza y automatiza la gestión del riego:
Con la aplicación SmartRain y VRI, la máquina de riego se puede controlar fácilmente desde cualquier PC, smartphone o tableta:
Svante Runfeldt, en la isla sueca de Gotland, tiene que gestionar toda la temporada con el agua de lluvia que recoge en un estanque de noviembre a enero y regar 120 hectáreas de diferentes hortalizas y cereales. Esto sólo funciona con un Pivot y VRI de BAUER.
Tradicionalmente, el sistema VRI (riego de caudal variable) se emplea en la agricultura para proporcionar a los diferentes cultivos de un campo la cantidad de irrigación adecuada de manera exacta para cada tipo de planta. Sin embargo, en Nueva Zelanda el 99 % de los sistemas VRI se emplean para el riego de pastos, como sucede en la granja Waituna Dairies. Los argumentos a favor son contundentes.